miércoles, 25 de noviembre de 2020

¿En qué se parecen el cerebro humano y el Universo? ABC CIENCIA

A priori pueden parecer dos conceptos poco o nada parecidos: ¿tienen algo en común el cerebro y el Universo? Ahora, un nuevo estudio realizado por un astrofísico de la Universidad de Bolonia y un neurocirujano de la Universidad de Verona, afirma que comparten mucho más de lo que pensamos, como un número parecido de neuronas y galaxias o la distribución y morfología de cada red. Como si el cerebro fuese una suerte de representación en pequeña escala del Universo. Los resultados se acaban de publicar en « Frontiers in Physics». «Similitudes sorprendentes» es lo que afirman haber hallado Franco Vazza, astrofísico de la Universidad de Bolonia, y Alberto Feletti, neurocirujano de la Universidad de Verona, quienes se centraron concretamente en el estudio comparado de dos de los sistemas más complejos de la naturaleza: la red cósmica de galaxias y la red de células neuronales del cerebro humano. Más similitudes que diferencias Según explican ambos investigadores, la diferencia más obvia entre el cerebro y el Universo es su tamaño: les separan más de 27 órdenes de magnitud. Sin embargo, esto no es un impedimento para que tengan muchas similitudes: el cerebro humano funciona gracias a su amplia red neuronal, que contiene aproximadamente 69.000 millones de neuronas; por su parte, los astrónomos estiman que el Universo observable contiene unas 100.000 millones de galaxias, lo que es un número bastante similar. No terminan ahí las semejanzas: dentro de ambos sistemas, solo el 30% de sus masas están compuestas por galaxias y neuronas; el resto, son largos filamentos o nodos que las unen. Y aún hay más: el 70% de la distribución de masa o energía está compuesta por componentes que juegan un papel aparentemente pasivo, en concreto el agua en el cerebro y la energía oscura en el Universo observable. «Superponiendo» ambas redes A partir de estas características compartidas, los investigadores llevaron a cabo una simulación de la red de galaxias con secciones de la corteza cerebral y el cerebelo. El objetivo era algo así como superponer la estructura cerebral y la espacial para observar si realmente existía un parecido. «Calculamos la densidad espectral de ambos sistemas. Esta es una técnica que se emplea a menudo en cosmología para estudiar la distribución espacial de las galaxias», explica Vazza. «Nuestro análisis mostró que la distribución de la fluctuación dentro de la red neuronal del cerebelo en una escala de 1 micrómetro a0,1 milímetros sigue la misma progresión de la distribución de la materia en la red cósmica pero, por supuesto, en una escala mayor que va de 5 millones a 500 millones de años luz». Los investigadores también calcularon algunos parámetros que caracterizan tanto la red neuronal como la red cósmica: la media de conexiones en cada nodo y la tendencia a agrupar varias conexiones en nodos centrales relevantes dentro de la red. Y los resultados volvían a indicar «niveles de concordancia inesperados». Izquierda: corte de cerebelo, con factor de aumento 40x, obtenido con microscopía electrónica (Dr. E. Zunarelli, Hospital Universitario de Módena); derecha: sección de una simulación cosmológica, con una extensión de 300 millones de años luz en cada lado (Vazza et al.2019 A&A) Izquierda: corte de cerebelo, con factor de aumento 40x, obtenido con microscopía electrónica (Dr. E. Zunarelli, Hospital Universitario de Módena); derecha: sección de una simulación cosmológica, con una extensión de 300 millones de años luz en cada lado (Vazza et al.2019 A&A) - Universidad de Bolonia Un fenómeno físico compartido «El tentador grado de similitud que expone nuestro análisis parece sugerir que la autoorganización de ambos sistemas complejos probablemente está siendo moldeada por principios similares de dinámica de redes, a pesar de las escalas y procesos radicalmente diferentes en juego», explican ambos científicos en su estudio. Es decir, que detrás de la evolución de la red neuronal y de la red espacial se encuentra el mismo fenómeno físico subyacente «aún con la llamativa y obvia diferencia entre los poderes físicos que regulan las galaxias y las neuronas», agrega Feletti, que recalca que ambas redes se parecen más entre ellas que «el Universo comparado con una galaxia o que la red neuronal con el interior del cuerpo de las propias neuronas». Los resultados de este estudio están impulsando a los investigadores a pensar en nuevas y más efectivas técnicas de análisis para ambos campos, que permitirán una mejor comprensión de cómo funcionan y cómo evolucionaron estos dos sistemas, comprendiendo la lógica común que rige que se parezcan tanto.

viernes, 22 de mayo de 2020

UNIVERSOS PARALELOS

Científicos de la NASA hallan evidencias de un universo paralelo donde el tiempo va hacia atrás

Científicos de la NASA han encontrado partículas que podrían explicarse con la existencia de un universo paralelo donde las leyes de la física serían al revés.


  • En ese universo las leyes de la física serían totalmente contrarias a las que conocemos
  • Este descubrimiento sigue a debate dentro de la comunidad científica y ya ha generado diversas opiniones

Unos investigadores de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) han encontrado partículas pertenecientes de fuera de nuestro universo tras un experimento de detección de rayos cósmicos.
Los expertos han dado un paso mas allá y apuntan a la teoría de que se podría tratar de un universo paralelo en el que las leyes de la física serían totalmente contrarias a las que conocemos.
Peter Gorham, autor del estudio publicado en la Universidad de Cornell y recogido por Republic World, defiende la importancia de la Antena Transitoria Impulsiva Antártica en todo este proceso. ANITA, como es conocido este instrumento, se encarga de transportar antenas electrónicas sobre la Antártida, donde se evitan desviaciones que condicionen el proyecto.
Pese a lo llamativo de este fenómeno, es habitual recibir partículas de alta energía provenientes del espacio exterior, puesto que algunas de estas son un millón de veces más intensa que cualquiera de nuestro universo.
Los neuritos de baja energía pasan por la Tierra sin problemática alguna, pero los que contienen mayor carga de energía se topan con la materia sólida del planeta. Por ello, el descubrimiento de la llegada de este último tipo puede atestiguar que están viajando hacia atrás en el tiempo.
Este descubrimiento sigue a debate dentro de la comunidad científica y ya ha generado diversas opiniones. Una de las posibilidades a las que apunta la NASA es que con el Big Bang se crearon dos universos paralelos que funcionan de forma inversa.

El científico reconoce que es una teoría casi increíble pero así trabajan

Gorham es consciente del revuelo que causa su teoría pero asegura que la ciencia funciona así. Algunos de sus colegas se muestran escépticos ante lo que califican como "eventos imposibles".
Ahora queda el trabajo de descifrar los datos encontrados y apuntalar las teorías distintas para llegar a una conclusión, un trabajo "emocionante" según asegura su equipo.


El científico reconoce que es una teoría casi increíble pero así trabajan

Gorham es consciente del revuelo que causa su teoría pero asegura que la ciencia funciona así. Algunos de sus colegas se muestran escépticos ante lo que califican como "eventos imposibles".
Ahora queda el trabajo de descifrar los datos encontrados y apuntalar las teorías distintas para llegar a una conclusión, un trabajo "emocionante" según asegura su equipo

Descubren rápido movimiento de un agujero negro

  Descubren rápido movimiento de un agujero negro supermasivo y se desconoce por qué Un grupo de científicos descubrió el movimiento atípico...